Eran lo menos parecido a una pareja perfecta…
Dana Devine acababa de confirmar su reputación de alocada al acostarse con Cal Brewer. Bien era cierto que siempre había sentido cierta debilidad por el nuevo jefe de policía, pero nunca habría pensado que haría realidad la fantasía. Y la realidad le decía que aquella relación no podía continuar; lo que no sabía era que Cal también estaba viviendo su propia fantasía. Y que no podía dejar de pensar en Dana y en pasar otra noche loca junto a ella…